-Una cosa es pisar la mierda al caminar y otra es regresar y
embarrar la jeta en ella-
Hace unos diez años le aconsejé esto a una amiga, no
entiendo porque a lo largo de mi vida no he podido seguir mis propios consejos.
Pensaba que no existe la bondad ni la maldad absoluta, pero
a veces me doy cuenta que hay gente tan dañada que cada que les damos una
pequeña entrada a nuestra vida buscan ofender.
Es interesante ver pasar el insulto frente a mis ojos cual
balón golpeado con torpeza, y detenerse
justo a mis pies.
Como buen escorpión tengo una respuesta, pero me da pereza
incluso desviarlo y lo dejo ahí a media cancha olvidado.
Ese insulto no me llega, no me lastima, no me produce
ninguna respuesta, pero me deja pensativa en por qué intento mantener una
relación cordial con alguien que me dañó tanto en el pasado.
-Supéralo María, nuestras
vidas se cruzaron hace más de diez años, no te pertenezco-
Hace diez años mi vida se cruzó con compañeros de clase, con
maestros, con ligues de anto, ellos no me buscan esporádicamente con la única
intención de ofenderme disfrazada de curiosidad por mi presente.
-te comportaste como
una puta y exigiste ser tratada como una señorita-
-Ayer me cogí una
vieja buenota, con las chichis firmes, no como las tuyas-
-A ti nunca nadie te
va a querer, solo eres un kleenex de mecos-
-Otra vez estas gorda?
–
Y como olvidar ese 27 de enero del 2005, donde reafirmó su
masculinidad de la manera más cobarde que un hombre puede probar su virilidad.
El pasado ya no influye en mi presente, pero creo que es
importante dejarlo en el lugar que pertenece,
la mierda embarrada en la banqueta lavare los zapatos y seguir
caminando.
Hace poco me descubriste por Instagram, así fue como llegué a aquí. Tus textos son sinceros, tienes mucho qué decir, eso es más loable que una buena técnica, pero no digo que no la tengas.
ResponderEliminarTe dejo el link de mi blog. No lo actualizo tan a menudo, pero espero te guste.
Saludos desde este lado del mundo.
http://dearpegiosyotrosdesvarios.blogspot.mx/