Conocí a Héctor hace casi 10 años, literal, se coló junto
con 4 amigos más a mi fiesta de 21 años , de esas tertulias mortales que
amanecía el piso negro y pegajoso y alguna que otra pertenencia perdida.
Quien te invitó?-
-Miguel-
-¿quién es Miguel?-
-un amigo, que conoce
a la que cumpleaños..-
-yo no conozco a ningún Miguel y yo soy la que cumple años.-
Sus ojos tristes, cara de niño bueno y 1.90 de altura me
conquistaron y decidí regalarme unos besos con él en la lavandería de mi casa.
Eran en total unos cinco chavos “más grandes” que por
casualidad llegaron a mi vida y la de mi roomie. A ella le gustó Iván y así
comenzó la pequeña y triste historia con Héctor.
Karla mi roomie empezó a salir con Iván y yo iba de colada a
las fiestas donde Héctor me evitaba y negaba haber tenido algo que ver conmigo,
nos convertimos en el chiste del grupo de amigos y en paralelo Karla romanceaba
con Iván.
Hector resultó ser un naco machista, sus chistes misóginos demostraban
la clase de persona que era, aun así tuve mis encuentros con Hector, todos a
escondidas y sin que sus amigos se dieran cuenta.. El chiste y la burla era yo, no él.
El mundo es muy pequeño y me enteré que habían corrido a Héctor
de su trabajo en Monterrey por golpear a una mujer en la oficina y había regresado a su natal Guadalajara.
Lo contacté para preguntarle sobre el tema y me contestó con
insultos y amenazas preguntando quien me había dicho eso, con lo cual comprobé
que todo era verdad.
También me enteré que se casó y que tuvo una niña y hace no
mucho me agregó a Facebook. De vez en cuando me hablaba que venía a México,
nunca tuve intensión de verlo porque sumado a las humillaciones recibidas, el sexo con él, las pocas veces que
pasó fue MUY malo plus LOS CASADOS NO SON MI ONDA.
Hace unos días me contactó, voy a México, vamos varios
amigos, es un congreso y van varios amigos del IPADE, acepté salir con él y sus
amigos solo porque quiero darme la oportunidad de conocer gente nueva, y creo
que hombres solteros del IPADE pueden ser prospectos interesantes.
No me esforcé mucho en arreglarme, pero me veía muy bien
aunque mi look era informal. Al llegar con él al bar me dijo que sus amigos ya
se habían ido, y solo estábamos nosotros, nos sentamos en una mesa y le
pregunté por su esposa y su hija.
-pues me casé porque
estaba embarazada, ya nos hemos mandado varias veces a la chingada, en
cualquier momento vuelve a valer madre-
Le conté un poco de mi vida ahorita, me contó de su
maestría, del “malentendido” con la vieja que se madreó
-como me ves?-
-más vieja… jajaja-
-claro, los años pasan, tú te ves igual-
Tomó muy rápido e insistía en que yo tomara a su ritmo, me
pidió incluso otro drink el cual no me tomé , me veía de arriba abajo mientras platicábamos
con sus mismos ojos tristes pero traté de llevar la conversación en un parámetro
de amigos, nos updateamos de los amigos en común y pedimos la cuenta.
-sabes María , eres
muy diferente de la persona que eras hace 8 años, pero en el fondo sigues siendo la misma
persona honesta y directa que siempre has sido, eso siempre me gustó de ti,
solo que ya no eres ni inmadura ni imprudente- (supongo un intento de
cumplido)
-vamos a otro lado
no?-
-te acompaño a tu hotel, está aquí
a media cuadra-
En algún punto intentó tocarme un
poco del codo cuando caminábamos, pero ni sus 3 tequilas en 2 horas sumados a
lo que llevaba tomando desde medio día le dieron el valor de intentar un
movimiento más conmigo.
Llegando en el lobby pedí mi
uber.
-tan pronto? Hay que tomarnos algo!-
-lo siento, estoy muy cansada, me
dio gusto saludarte.
Cuando llegué a mi casa los
recuerdos volvieron, Héctor es peor que solamente mal sexo y de igual manera me
di cuenta que esa María que lo avergonzaba hace 10 años, hoy lo intimidó.
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