martes, 21 de noviembre de 2017

CANSADA

Estoy cansada de seguir creyendo promesas falsas, estoy cansada de mentiras, de juegos, de mensajes confusos, de miradas con doble significado, de recibir y tragar migajas, cansada de esta soledad, de esta seguridad fabricada, de esta fragilidad emocional que se desborda cual mierda de escusado tapado a la primer jalada del pendejo que no alcanzó a notar mi atrofiada naturaleza.

Estoy cansada de malabarear con los recursos que tengo a mi alcance, estoy cansada de apostar por mi, de creer y esperar que las cosas funcionen por el simple hecho de no quitar el dedo del renglón, estoy cansada de seguir creyendo en el “te llamo en un ratito” “ahorita queda el depósito” “lets meet tomorrow”. Estoy cansada de pretender ser lo que me gustaría ser. Estoy cansada de actuar correctamente, estoy cansada de aparentar que las cosas no me afectan, estoy cansada de correr y no avanzar.

Estoy cansada de las dietas, de los hombres, de mi ambición, de mis metas autoimpuestas, de mi naturaleza pretenciosa, de mi afán de meter la nariz en los lugares equivocados, de mi capacidad por permitir ser demeritada y aún en estos días hasta humillada, de mi transparencia, de mi terquedad, de mi impaciencia, de mi naturaleza fiel, de la velocidad de mi mente, de mi libido sexual.


Porqué simplemente no puedo ser conformista?

viernes, 22 de septiembre de 2017

7.1 grados Richter




Esa mañana estaba muy confundida, no sabía si debía renunciar o no al plan de vida que me había imaginado durante los últimos meses, un giro de 180 grados que me llevaría a amanecer diario siete horas antes que al resto de mi mundo actual.

Algo empezaba a apestar, no quería reconocer lo evidente, no quería equivocarme, aún no tenía la respuesta que unos cuantos días después fue cristalina.

Ese día pasaba con prisas, muchas ideas dando vueltas, compromisos y pendientes, nada del otro mundo pues estoy acostumbrada a pensar en todo al mismo tiempo.

Al medio día una sacudida me distrajo y antes de que me diera cuenta me vi envuelta en un fuerte movimiento interminable que cada vez tomaba más potencia, sentí que el piso frente a mí se abriría de un momento a otro, por fortuna estaba en la calle y mi mente se centró en mi familia, mi casa, mi vida tan aparentemente sólida y recé en voz alta suplicando que terminara esta pesadilla.

La tierra de pronto dejó de moverse pero mi cuerpo seguía en shock, mis manos no dejaban de temblar y como pude mandé un mensaje de voz ya que no podía escribir diciendo que estaba bien y preguntando por mi hermano, el único que vive en el DF, en el fondo sabía que algo grave había pasado. Mi hermano contestó más tranquilo que yo, y así entre idas y venidas de la señal se reportó la gente que me importa y me fui enterando poco a poco que nuestra realidad había cambiado.

Mi celular tenía muy poca batería y  me quedé incomunicada muy pronto. Entre esas tantas horas sin electricidad pensé en él, cómo no voy a pensar en él? Tal vez estaba preocupado porque no me reporto, cómo iba él a saber que estoy bien? Recodé que traía en mi bolsa una batería portátil seguramente sin carga y me sirvió para que prendiera nuevamente el celular y mandar un mensaje diciendo “estoy bien” a las cinco  mías y once suyas.

Sin luz, ni señal compramos unas pilas en la papelería/tlapalería que atiende como cuando era niña, sin computadoras ni cajas registradoras, con notas de papel y pluma. Pasé las siguientes horas en Coyoacán escuchando en el radio información que evidentemente era mesurada.

La luz volvió por ahí de las 10 pm, para entonces yo sabía que era imposible volver a la condesa esa noche, para esa hora empecé a comunicarme con más personas y entre todos intercambiábamos información, varios conocidos habían tenido daños fuertes en sus casas, pero ninguna pérdida humana cercana, todos estábamos asustados y tristes, habíamos corrido con suerte pero muchos vecinos nuestros seguían sin saber de sus familiares.

No recibí ningún mensaje de él, ya había decidido desde antes romper comunicación con él pero un desastre de estas magnitudes ameritaba cierto contacto.
“sentí que se acababa el mundo”
“me asusté mucho”
“se cayeron edificios “

Amanecí muy temprano a una ciudad envuelta en polvo, callada y tímida. Me apuré para irme a la condesa, me urgía ver a mi gatita, ver mi casa.  Mi teléfono amaneció con un mensaje de “ha temblado?” “algo escuché en la radio”  junto con otros mensajes de amigos en Canadá, Vietnam, Fancia, interior de México y Estados Unidos,  todos preguntando si estaba bien, amigos de esos de poca comunicación , pasando por el ex y terminando con aquel que solo compartí unos besos hace años.

Me llamó a medio día pero por la psicosis había dejado el celular cargando, decidí regresarle la llamada hasta estar en mi casa por ahí de las dos de la tarde y la rechazó.
“ahora no puedo contestar, te llamo más tarde”
“no me llames, no es necesario”
“que sí, que te marco en un rato”

Esa tarde en mí casa la tristeza se apoderó de mí, me di cuenta cómo mi ciudad y mi colonia estaban rotas, aunque había muchas muestras de ayuda, el camino sería largo y todos los que vivimos aquí estaríamos afectados de alguna manera u otra.

Recibí su llamada a la cinco:
 -tembló no? Así como la semana pasada no?-

Me dolió darme cuenta del nulo interés por lo que me pasa, algo que ya sabía desde antes, me dolió porque el mensaje era muy claro y las pruebas eran muy extremas. Discutiendo prolongamos la llamada tres horas y se disculpó por tener un día ocupado en el cual no había tenido tiempo de ver las noticias, le echaba la culpa a su agenda ocupada pero yo sabía perfectamente que no hay pretexto para no escarbar un poco más en un mensaje tan fuerte como un “estoy bien”.

La discusión pasó de un tema a otro, me dijo estar seguro que me quiere, que quería estar conmigo, pero ahora no estaba convencido de dar pasos tan grandes, que fuéramos amigos, que tal vez más adelante. Una fisura de 45 grados hizo inevitable que colapsara cualquier sentimiento confundido que tenía por él.

El siguiente día fue muy extraño, la tristeza era un sentimiento predominante, un silencio anormal en la condesa interrumpido solamente por incontables ambulancias, lluvia, polvo, edificios caídos, cayéndose, edificios acordonados a cincuenta metros de mi casa, a cien, a quinientos.

Tengo que agradecer que estoy bien, mi edificio no se distingue por ser el más bonito de la zona, pero para mi tiene su encanto, con sus ochenta años en pié soportó esta zarandeada y no pude encontrar ni una copa rota.

Hoy me doy cuenta cómo este movimiento trató de derrumbarme, uno que otro fantasma del pasado cual polvo en derrumbe se levantó por algunos minutos para después regresar al pasado donde pertenece.

Tal vez fui débil, tal vez aparento ser débil, pero creo que hoy después de tanto putazo, SOY FUERTE, SOMOS FUERTES.

lunes, 29 de mayo de 2017

20, 23, 31

Horacio fue mi mejor amigo durante la universidad, era el típico hipster antes de que el término “hipster” se utilizara, era guapo, alto y  uno de los pocos compañeros heterosexuales estudiando diseño, por lo cual era altamente cotizado, nuestra amistad era estrictamente platónica, éramos además de amigos y compañeros de clase vecinos, pasábamos más de 12 horas diarias juntos, hablar de sexo era algo común entre nosotros y los juegos inocentes un día subieron de tono y nos pasamos de la raya.  Horacio se distanció de mí, supuse las razones, una suma de factores como su novia a distancia, sus principios morales y su conocimiento de mi padecimiento de enamoramiento subito.
Creo que de las perdidas más fuertes que he tenido ha sido su amistad, volvimos a hablar hace pocos años, entre esas habladas un día tuvo una escala en el DF y se quedó en mi casa, obviamente consumamos eso que teníamos pendiente y no volví a saber de Horacio, a veces me arrepiento de no haberlo confrontado y preguntado directamente la hipótesis de muchos amigos en común, que él estaba enamorado de mí, hipótesis que me resultaba difícil creer, pero en caso de ser cierta sabía que el único motivo para alejarse al estar enamorado era que yo no era suficiente para él, no era lo suficientemente atractiva como el tipo de mujeres con el que él salía.

Fabién fue mi novio francés, fue un noviazgo corto durante el otoño en París, yo estaba dispuesta a comenzar una nueva vida a su lado pero al parecer mis problemas eran demasiado para él, volvía a mi casa a pasar las fiestas de navidad y decidió cortarme para que tomara decisiones sobre mi futuro pensando solamente en mi sin tenerlo en cuenta, obviamente decidí volver, ese último mes en Paris fue desgarrador, nunca había vivido un invierno en Europa, contaba los días lentamente y los recuerdos son borrosos, recuerdo llamarlo un día antes de regresar a México, “Me voy mañana…” permaneció callado varios segundos y me colgó” recuerdo llorar esa noche, llorar en Charles de Gaulle y llorar en Mariano Escobedo, recuerdo analizar lo que pasó varios meses después y darme cuenta que si hubiera sido fuerte seguramente hubiera regresado con él, talvez me hubiera casado con él y talvez estaría hoy de vuelta en México divorciada, pero me aferro a creer que sí me quiso, aunque fuera solamente ese otoño.


Ignacio logró colarse en un corazón hermético: su transparencia, su simplicidad y su al menos aparente inocencia me hicieron bajar la guardia y permitirlo entrar a lo más profundo de mi intimidad, sin maquillajes, ni poses, ni apariencias, con 10 kilos más y 10 kilos menos, conoció mis berrinches, mi carácter, mis caprichos, mis juegos mentales, mis ataques psicológicos buscando asustarlo, alejarlo. Con Ignacio me di cuenta que el cariño vale más que él éxito profesional, que un cumplido tímido y torpe es preferible a un elocuente mentiroso, Aprendí a disfrutar desayunar en calzones chilaquiles con tortilla de patatas, a comer jamón ibérico sin contar calorías,  entendí que me quiere, que le gusto y que me admira por quien soy realmente, no por lo que aparento ser o lo que podría llegar a ser. Ignacio me quiso, talvéz solo esos días, pero me quiso.

domingo, 21 de mayo de 2017

QUIERO MÁS

“Cógeme con cariño, como si me quisieras"

“me gusta el sexo romántico,  solo abrázame unos minutos al terminar”

“mírame a los ojos”

“y si jugamos a que somos novios? , solo por un ratito”

“pégate a mi cuerpo, me gusta sentirte cerca, tu peso sobre el mío”

“no me gustan los besos babosos, ni mordidas, me gustan suaves y románticos”

                             

                              -tienes una mirada muy fuerte-

                               -me da calor abrazar-

                               -eres una persona muy pasional-

                               - creo que estás buscando algo que no puedo darte –

                               - no me había dado cuenta lo tarde que es, tengo que irme-

                               -yo te llamo-

jueves, 9 de marzo de 2017

etiqueta

De niña siempre fui muy consentida, me encantaba comprar ropa: el rosa, el glitter, los olanes, el terciopelo de finales de los ochenta.

No estoy segura si los aires de grandeza fueron algo aprendido o simplemente parte de mi naturaleza, pero era algo que mi mamá siempre fomentó en mí, yo era una princesa.

A los tres años seleccionaba antes de vestirme los accesorios que usaría, aún en calzones me enjoyaba con las cosas de mi mamá, que después cambiaba por moños y bolsas más acordes a mi edad.

Mi papá llamó ese día para decirnos que íbamos a salir a cenar, corrí a mi closet para sacar ese vestido nuevo comprado el día anterior (o tal vez esa misma tarde) pues era la ocasión perfecta para estrenarlo.

El vestido era de cuello de tortuga morado y se abría en A desde el cuello y hasta las rodillas, nada especial pero el solo estrenar hacía la ocasión especial.
Al llegar al restaurante mi entusiasmo se desplomó.


-me arreglé tanto para venir a unos simples tacos?-

viernes, 3 de marzo de 2017

Doctor Mojón

No entiendo en que se basa Facebook para sugerir un “amigo”,  un error o coincidencia en los algoritmos hizo que me apareciera la madre del doctor mojón. No tengo ni idea de su nombre pero al verla junto a su retoño entendí de quien se trataba… Facebook está muy trastornado con semejantes sugerencias.

Como olvidar al doctor mojón, entró en mi vida los últimos meses en Monterrey, acababa de graduarme y por primera vez tenía un trabajo, que por cierto cero me gustaba.
El doctor mojón era amigo de mis amigos, siempre se me había hecho atractivo pero sabía que tenía una novia perpetua. Ese día de verano caluroso Facebook chismoso me contó que el Mojón estaba Single, aunque no nos conocíamos directamente los dos sabíamos quién era el otro y decidí enviarle un inbox y quedamos para salir.

Pasó por mí, fuimos por unos drinks y todo terminó en mi cuarto. Los días siguientes el mojón me visitaba casi diario para la dotación de besos y aparentemente todo avanzaba muy rápido.

-sabes, tengo que contarte algo.. Tuve una discusión muy fuerte con mi novia, pero no hemos cortado, ya estamos en las últimas.. Pero no quiero engañarte-

No me encantaba empezar una relación cuando él aún no había terminado la otra pero era cuestión de tiempo que algo que ya se había terminado se acabara por completo.

-Hola como estás, sabes.. dejé mi sesión abierta en Facebook y mi novia leyó tus mensajes, va a marcarte para preguntar de que se trata, plz di que todo es un malentendido-

En esa llamada me di cuenta que la única que sobraba aquí era yo, y que nada iba a ningún lado con el doctor mojón, obviamente no me presté a sus mentiras.

La voluntad nunca ha sido lo mío y la venganza es algo que me brota con naturalidad, volví a ver al doctor mojón y en la cama toqué el tema de lo mucho que quiere a su novia, tanto que estaba nuevamente en mi cama, todo acabó en resentimientos y se fue sin despedir.

En aquel entonces no sabía de anticonceptivos más allá de condones, y revolví interrumpir un tratamiento con pastillas con día siguiente y como resultado me quedé sin periodo por 3 meses.
Ese tiempo fue un proceso desgastante, lleno de ataques psicológicos y amenazas de todo tipo.
Cuando todo terminó, me enteré que Dr. Mierda había vuelto con su novia y eran más felices que nunca, al parecer yo incluso había ayudado a que su relación se fortaleciera, además de todo esto llegó a mis oídos que la novia andaba diciendo a quien quisiera escuchar que yo estaba loca, que me había inventado una relación con su fiel novio y que el pobre era acosado por una enferma.

Ahí dije es suficiente, conseguí su teléfono y le marqué.

-qué crees que sea más lógico? Que tu novio te haya puesto el cuerno? O que estoy tan loca como para inventarme esta historia?
Increíblemente contestó –lo segundo-

-En ese caso no solo estoy loca, también soy vidente porque sé que tu novio tiene un lunar en su diminuto pene –

lunes, 13 de febrero de 2017

El hijo del Gober


Tenía 17 años, a lo mucho llevaba dos meses en Monterrey , mi primer residencia fue esa casa en la del Valle que apodaban la Playboy house porque  vivamos como 20 chavas todas estudiantes.
Un miércoles cualquiera, una de las veinte inquilinas me interrumpió de mis tareas ñoñescas y me invitó por unos litros EN MIERCOLES, al parecer era una doble cita donde me contó que el otro chavo era hijo de un exgobernador de un estado del norte, guapo, rico y estudiante de una ingeniería de esas muy difíciles.

Me arreglé y con cero experiencia en el tema de citas y un poco nerviosa por mi clase de las 8 am salí y me topé con un wero de 1.85 de 21 años y ojos verdes  excampeón de natación manejando un BMW.
No recuerdo mucho de esa cita, solo que me tomé un litro que me mareo un poco y al dejarnos en la casa intentó besarme a lo que torpemente evadí el beso porque aún no daba yo mi primer beso y no esperaba fuera de esa manera.

Daniel siguió buscándome, y la torpe de María en la siguiente cita invitó a una amiga por lo que evidentemente él perdió todo interés en mí.

Seguro fantaseé por meses con ese príncipe azul perfecto y me pregunté mil veces que hice mal porque en aquellas fechas cada que aparecía un hombre a los 10 minutos perdía interés.

Muchos años pasaron y me volví a topar con él, ahora vivíamos en el DF y tuvimos el date que tanto esperé muchos años antes. Platicamos de varios temas, de su vida en el presente, de lo tonto que era cuando nos conocimos y yo dejé en claro que esa inmadurez había quedado en el pasado.

Nuestra cita prosiguió a su recámara, Daniel apagó la luz y el juego fue a oscuras, la historia tardó más en comenzar que en terminar y se disculpó por el inconveniente, me sorprendió que no me dejó prender la luz hasta que estuviera vestido y me fuí.


Volvimos a vernos unas semanas después pero esta vez directamente en su departamento, ahora la historia fue completamente diferente, nada funcionaba y de nuevo la historia terminó sin comenzar.

Todo es cuestión de perspectivas.

domingo, 5 de febrero de 2017

Dia de la bandera

Cada año intento evadir la fecha, pero en algún momento del día te recuerdo, me doy cuenta que llevas la mayor parte de mi vida fuera de esta y me sorprende como sigue afectándome el haberte perdido.

Ya no intento descifrar mi naturaleza en tu recuerdo, sé que la persona que soy hoy se ha forjado a prueba y error, causa y efecto y poco tiene en común contigo.  

Sin pensarlo ni buscarlo, mi vida ha encontrado esos satisfactores en las mismas cosas que tu disfrutabas: te recuerdo en programas de radio, escribiendo cuentos, canciones, pintando, cosiendo, buscando siempre nuevas formas de expresarte, o ayudando en esa ONG que fundaste y que hoy sigue operando.

No estoy segura que pensarías del camino que ha tomado mi vida, pero seguramente si las cosas no hubieran sido como fueron mi presente sería muy diferente.


Entre más pasa el tiempo el capítulo juntas se va haciendo más corto, pero de alguna manera, sigues siempre presente.

sábado, 28 de enero de 2017

Chingona

Siempre he tenido la bara muy alta, tan alta que nadie me llena el ojo y los que me gustan.. no me pelan, o al menos no para algo real.

-Te sientes muy chingona-

Tengo que aceptar que soy un poco arrogante, pero mi arrogancia es consciente de sus limitantes, no soy la vieja buenota con pedigree y cara de muñeca que con una sonrisa hace girar al mundo.

Al menos ya no busco a Mr.Right para que tome el volante de mi vida, a veces siento que busco a Mr. Wrong .. pero esta tema, es otro post.

Desde siempre me han gustado las cosas buenas, aprendí que para conseguir lo que quiero debía conquistar a un buen partido. Hace poco descubrí que es más sencillo trabajar para conseguir lo que quiero que intentar conquistar/retener/soportar un cabrón que difícilmente me dará el estilo de vida que quiero y merezco,  esa vida que estoy trabajando para conseguir.

Y si, desde siempre he obtenido todo lo que quiero a base de chingarle, desde mi beca de excelencia, ese año en Francia, mi trabajo, mis viajes, mi casa, mis cosas, mis gustos.

Sería más sencillo que un wey me diera todo, pero lo fácil aburre .. y si.. al final de cuentas, no es por ser mamona.. pero .., no me siento, SOY chingona.


X

jueves, 19 de enero de 2017

Mierda

-Una cosa es pisar la mierda al caminar y otra es regresar y embarrar la jeta en ella-


Hace unos diez años le aconsejé esto a una amiga, no entiendo porque a lo largo de mi vida no he podido seguir mis propios consejos.

Pensaba que no existe la bondad ni la maldad absoluta, pero a veces me doy cuenta que hay gente tan dañada que cada que les damos una pequeña entrada a nuestra vida buscan ofender.

Es interesante ver pasar el insulto frente a mis ojos cual balón golpeado con torpeza, y detenerse  justo a mis pies.

Como buen escorpión tengo una respuesta, pero me da pereza incluso desviarlo y lo dejo ahí a media cancha olvidado.

Ese insulto no me llega, no me lastima, no me produce ninguna respuesta, pero me deja pensativa en por qué intento mantener una relación cordial con alguien que me dañó tanto en el pasado.

-Supéralo María, nuestras vidas se cruzaron hace más de diez años, no te pertenezco-

Hace diez años mi vida se cruzó con compañeros de clase, con maestros, con ligues de anto, ellos no me buscan esporádicamente con la única intención de ofenderme disfrazada de curiosidad por mi presente.

-te comportaste como una puta y exigiste ser tratada como una señorita-

-Ayer me cogí una vieja buenota, con las chichis firmes, no como las tuyas-

-A ti nunca nadie te va a querer, solo eres un kleenex de mecos-

-Otra vez estas gorda? –

Y como olvidar ese 27 de enero del 2005, donde reafirmó su masculinidad de la manera más cobarde que un hombre puede probar su virilidad.


El pasado ya no influye en mi presente, pero creo que es importante dejarlo en el lugar que pertenece,  la mierda embarrada en la banqueta lavare los zapatos y seguir caminando.

jueves, 12 de enero de 2017

MARCO



Últimamente he actualizado más seguido este espacio, solo comparto mi punto de vista y me pareció interesante pedirles a hombres involucrados en mi pasado o presente que escribieran un poco de mí, Marco es muy directo, más de lo que puedo digerir la mayoría de las veces. Lo conocí a mediados de 2013 y ahora vive en Nueva York, aún seguimos en contacto y mi obsesión por él evolucionó a un cariño desbordado que estoy segura es mutuo, aquí su correo:


-Me parece interesante-

Fue lo primero que pensé cuando vi su foto en esa página de encuentros.

Cabello negro y largo, expresión seria pero con bonita cara, una camisa blanca, un estilo europeo.

Porque no.. y le escribí.

No recuerdo bien cual fue nuestra conversación inicial pero quedamos en salir y conocernos. Ambos vivíamos en la Condesa por lo que quedamos de vernos en uno de los tantos bares de la zona.

A penas llevaba dos semanas en el DF y el bar escogido era el único interesante que conocía.

Nos sentamos y desde el inicio se comportó como una princesa.

Muy segura de sí misma, muy entusiasmada con su nueva aventura profesional. Acababa de dejar su trabajo de vendedora de muebles de lujo para ser empresaria del design.

Me contó de Francia, del norte de México, de la vida en el DF que yo aún no conocía.

Hablaba muy bien, corregía mi español que aún era una mezcla de tres lenguas diferentes y era muy energética. De hecho, pensé que talvez yo la estaba aburriendo.

María, una ametralladora de palabras, experiencia, novios pasados y futuros, hombres que la pretendían pero que no le llenaban el ojo.

Y yo calladito, tomando mis primeros tequilas.

Después de unos cuanto drinks la noté un poco más coqueta, estábamos sentados en un sofá en una esquina obscura del bar, que ya estaba vacío.
Ella tenía mucha confianza y yo no sabía qué hacer.. Intenté besarla.

Ella evitó mi beso.

-Las mujeres en Brasil son tan fáciles? Aquí somos diferentes, yo soy diferente..-


Y aprendí que de verdad era diferente, en varios sentidos, fue todo un descubrimiento.

miércoles, 11 de enero de 2017

Presidente

Tim rondaba los cuarenta y pico y vivía en el Presidente, llevaba varios meses hospedado ahí mientras buscaba un departamento amueblado.

-¿Trabajaste en diseño de interiores?  Tal vez puedes ayudarme con mi departamento-

Lo primero que llamó mi atención fue su estilo, me encantan los hombres europeos de 40 y pico que transpiran elegancia.

Platicamos de todo un poco, él hablaba excelente español, me contó de su trabajo, de sus viajes dentro de México y me invitó a conocer su castillo en Francia cuando quisiera.

Tim además de guapo era interesante, tenía justo la edad límite y los atributos para pensar en el como un posible prospecto amoroso.

Terminamos la cena en su habitación y nos adelantamos a comernos ese postre que debí haber reservado para el tercer date.

Por su trabajo Tim rara vez estaba en la ciudad. Seguimos en contacto esporádico y coincidimos 2 o 3 veces en intervalos de 3-5 semanas.


-¿Te late vernos hoy?-

-No puedo.. Tengo una cena con compañeros de trabajo.-

-Invítame-

-No puedo, conocen a mi esposa-

-¿Qué??? Estas casado?!-


-Ah.. ¿no te lo había comentado? –

lunes, 9 de enero de 2017

CHEZ MOI


Al Dorian, como bauticé a Mr. Porsche lo había visto dos veces. Después de varias “reagendadas” quedamos en vernos en mi casa.

El tema de desnudarme tanto con él me ponía nerviosa. Desde hace muchísimo no me gustaba tanto alguien como me gusta él, por lo que me moría de miedo de volver a perder mis objetivos ante la llegada de un hombre interesante.

Me sorprendo a mí misma al darme cuenta que no soy la niña de 20 años que confundía el sexo con amor, ni que ante dos palabras bonitas le sonaban las campanas de la iglesia en la cabeza.

Con el Dorian es diferente, Nunca me gustaría terminar con un hombre como él: mujeriego por naturaleza, con los recursos que buscan esas viejas trepadoras y él más que dispuesto al trueque de cariño por nalgas firmes, o mejor dicho … nalgas nuevas, de esas que no se ha comido aún y que mientras se las come está pensando en las siguientes.

No me interesa un hombre así, eso que a las otras les gusta a mí me da repele, me caga su carro, me caga su celular alterno de viejas cual “librito negro” pero además de teléfonos repleto de fotos de viejas encuerdas y entre esos números el mío, porque al final soy eso.. Una más en el librito coqueto.

Me encantan sus ojos, sus besos, su estatura que embona perfecto con mi anatomía, su sonrisa y los orgasmos consecutivos que me regala como bolo de bautizo, su mente trastornada la cual estoy constantemente midiendo con la mía, que a veces siento me supera y otras se me queda corta, me encanta su estilo de vestir, su cuerpo imperfecto que me parece perfecto, Su olor, su sabor, su voz y esos modales de caballero que pierde mientras disfruta mis abrazos.

En parte todo lo que me caga de él me encanta, gracias a esto sé que el Dorian no es materia amorosa, y prefiero entrar a la arena con  él a torear un rato para después volver a mi vida real.

Intenté recibirlo sin ropa y solo con una bata encima, pero los nervios de toparme un vecino jodieron mi idea coqueta y la hicieron incómoda.

Tan solo llegar me quitó la bata me puso contra la pared y me dio una probadita de eso que me vuelve loca , él con ropa aún..

Le enseñé mi casa y nos fuimos desnudando por todos lados, cogiendo entre los  tantos espejos que tengo en mi casa y disfrutando los diferentes ángulos de nuestro ritual privado.

-Quiero ser tuya-

-Ya lo eres-

Después de dos horas de placer recordó su cita de las 4 y aunque me dejó bien alimentada yo con lo tragona que soy me quedé con más ganas de él, mañana se va a nueva york y ni siquiera se si lo voy a volver a ver, en parte ya no me da miedo, en parte sé que no soy ni la vieja más buenota, ni la que mejor coge, ni la que más le gusta, pero por alguna razón dos citas se hicieron tres, y tal vez tres se hacen cuatro y si no pues lo que sigue.